En la andadura que supone el Tai Chi Chuan, muchos son los pasos que hay que dar. No todos son para avanzar, en ocasiones toca retroceder. A veces hay que pararse a meditar y otras hay que observar con atención; sin perder nunca el centro.
Cuando se le propuso a Javier Arnanz una serie de cursos sobre las bases del empuje de manos, este era el espíritu. Avanzar en el conocimiento a veces requiere retroceder a las bases y asentarlas de nuevo para remozar las ideas.
En este primer taller se nos obligó a prestar una enorme atención a los aspectos básicos del Zhan Nian Jin: la energía de adherir pegar, dejándonos un montón de trabajo para una buena temporada. Continuar leyendo «Manos sensibles, lecciones sutiles»